Descubre una receta exquisita de pollo asado con patatas y judías verdes, donde la sinfonía de sabores se entrelaza con una amalgama de aromas irresistibles, deleitando hasta los paladares más exigentes. Es perfecta para aquellos momentos en los que deseas disfrutar de una comida reconfortante sin sentirte culpable. El pollo asado resulta jugoso y lleno de sabor, mientras que las patatas y las judías verdes añaden una textura y un toque fresco al plato. Además, al utilizar ingredientes saludables y técnicas de cocción que minimizan el uso de aceite, estamos asegurando una opción equilibrada y amigable con nuestra salud.
Te guiaré paso a paso para que puedas recrear este plato en tu propia cocina. Descubrirás cómo transformar ingredientes simples en una comida completa y satisfactoria.

¡Prepárate para deleitar a tus papilas gustativas con esta exquisita receta de pollo asado con patatas y judías verdes! Toma nota de los ingredientes, enciende el horno y prepárate para disfrutar de una comida saludable y llena de sabor.
¿Qué vas a encontrar en este post?
Ingredientes
- 1 pollo entero (aproximadamente 1,5 kg)
- 4 patatas medianas, peladas y cortadas en cubos
- 250 g de judías verdes, puntas recortadas y cortadas en trozos
- 4 dientes de ajo, picados finamente
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharadita de romero seco
- Sal y pimienta al gusto
- Zumo de medio limón
Elaboración
- Precalienta el horno a 200°C (400°F).
- En un bol pequeño, mezcla el aceite de oliva, el pimentón dulce, el romero, el ajo picado, sal y pimienta. Esta mezcla será la marinada para el pollo.
- Lava el pollo y sécalo con papel de cocina. Colócalo en una bandeja de horno y frota la marinada por todo el pollo, asegurándote de cubrirlo completamente. Si es posible, deja que el pollo repose en la nevera durante al menos 30 minutos para que los sabores se mezclen.
- En otra bandeja de horno, coloca las patatas cortadas en cubos y las judías verdes. Rocía con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto. Mezcla bien para asegurarte de que los vegetales estén cubiertos de aceite y especias.
- Coloca tanto el pollo como la bandeja de patatas y judías verdes en el horno precalentado. Cocina durante aproximadamente 1 hora o hasta que el pollo esté dorado y bien cocido. Asegúrate de que las patatas estén tiernas y las judías verdes estén tiernas pero crujientes.
- Una vez que el pollo esté listo, retíralo del horno y déjalo reposar durante unos minutos antes de cortarlo en porciones.
- Sirve el pollo asado junto con las patatas y las judías verdes en un plato. Rocía con el zumo de medio limón para agregar un toque de frescura antes de servir.
Llegó la hora de disfrutar
Esta deliciosa receta de pollo asado con patatas y judías verdes es mucho más que una simple comida saludable y equilibrada. Es un abrazo reconfortante para el alma y una explosión de sabores que te transportará a momentos de felicidad en cada bocado. El pollo asado, jugoso y lleno de sabor, despierta tus sentidos y te envuelve en una sensación de satisfacción. Las patatas y las judías verdes, con su textura deliciosa y su sabor fresco, crean una sinfonía de sabores que te hará suspirar de placer.
Esta combinación de ingredientes no solo es un deleite para el paladar, sino que también es una muestra de amor hacia tu cuerpo y bienestar. El pollo, con su calidad de proteína magra, te brinda la energía necesaria para enfrentar el día con vitalidad, mientras que las patatas, ricas en fibra y vitaminas, te hacen sentir saciado y satisfecho. Las judías verdes, cargadas de nutrientes esenciales, te regalan una explosión de frescura y vitalidad.
Para completar esta experiencia culinaria llena de emociones, te invitamos a acompañar este plato con una ensalada fresca. Imagina el estallido de colores y el crujir de las hojas verdes mientras te deleitas con cada bocado. Cada ingrediente de la ensalada te acaricia el paladar, proporcionando un contraste perfecto con el pollo asado, las patatas y las judías verdes.
En resumen, esta receta de pollo asado con patatas y judías verdes es un regalo para tus sentidos y una manifestación de cuidado y amor propio. Preparar este plato no solo es alimentar tu cuerpo, sino también nutrir tu espíritu y alimentar tus emociones. Permítete disfrutar de cada sabor, cada aroma y cada textura mientras te envuelves en una experiencia culinaria que te hará sonreír de satisfacción.
Así que, dale rienda suelta a tus emociones y prepárate para disfrutar de esta deliciosa combinación de sabores en cada bocado. ¡Bon appétit!